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DECÍAN QUE ERA FILÓSOFO

21-11-2021 9:14 p.m.

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En la muerte de Antonio Escohotado.

Por Germán Pose - Otro amigo que se va, de los que ya no vuelven, otro nombre que se queda clavado en la agenda como las balas de Bogart en el bosque petrificado. Se largó a su modo Antonio Escohotado, en su isla bonita, sabio de solera clásica y bigotillo antiguo. Todo quisque se muere, aunque, como decía mi madre, solo se mueren los buenos. Pero hay muertes que le hacen a uno inmortal porque la parca te puede quitar de en medio con un golpe seco de güadaña pero nunca será capaz de espantar para siempre el aroma de los genios. Ay, esa dulce y penetrante fragancia que envuelve a los elegidos. 

Los fieros vikingos tenían cerradas las puertas del Valhalla si regresaban a su aldea ilesos tras la batalla, sin un rasguño en su piel. Escohotado, que se solazó en vida en su paraíso propio, con sus maneras de dandy castizo, nunca se vio forzado a lucir las cornadas de sus duelos para sacar pecho de guerrero, más bien, todo lo contrario, se relamía en silencio sus heridas, muy templado, y las sacaba lustre fino. Y en esas cornadas internas tan luminosas residía como un diamante de cabaret la clave secreta de la existencia, para el que la quisiera ver. 

A un tipo que dice que “quería ser valiente y terminé aprendiendo a estudiar. Antes me daba miedo morirme. Cuanto más he ido aprendiendo a saber menos miedo me da” hay que atarle en corto, porque los titiriteros del poder, siendo imbéciles, tienen claro que el conocimiento prende la llama de la rebelión. Y Escota sabía más que los ratones colorados. Y desplegaba su capote de sabiduría con tal majestuosa naturalidad que era un insulto para los más cretinos. Con el tiempo, se fue aplacando su nervio mientras se iba prendando del misterio del temple. Y entonces, ya con pellizco subido, sin crispación y citando de largo con el capote en cucurucho, la superioridad resultó arrolladora, rayando en lo obsceno. ¿Qué se puede pensar de un tipo que piensa esto?:

«Un país no es rico porque tenga diamantes o petróleo. Un país es rico porque tiene educación. Educación significa que, aunque puedas robar, no robas. Educación significa que tú vas pasando por la calle, la acera es estrecha y tú te bajas y dices: 'Disculpe'. Educación es que, aunque vas a pagar la factura de una tienda o de un restaurante, dices 'Gracias' cuando te la traen, das propina y cuando te devuelven, lo último que te devuelvan, vuelves a decir 'gracias'. Cuando un pueblo tiene eso, cuando un pueblo tiene educación, un pueblo es rico».

Pues eso. Decían que era filósofo. Es que hay gente pa’tó. Que nos pongan de beber.

Antonio Escohotado, filósofo y escritor, autor de "Historia general de las drogas" y "Los enemigos del comercio", entre otras obras monumentales, falleció el sábado en Ibiza a los 80 años de edad. 

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