REDACCIÓN - El Museo Nacional del Prado presenta hoy, en la sala 7A del edificio Villanueva,> la obra "David vencedor de Goliat" de Caravaggio después de someterse a una profunda restauración en el marco del programa patrocinado por la Fundación Iberdrola España.

El principal objetivo de esta restauración ha sido devolver a la obra su imagen original concebida por el maestro del claroscuro, Michelangelo Merisi “il Caravaggio”. Con el tiempo, la obra había perdido su esplendor original bajo el efecto de capas de suciedad y barnices oxidados. La restauración buscó eliminar la opacidad de los antiguos barnices, que suprimía el espacio y la profundidad en la composición.

La limpieza selectiva del pasado, centrada en los primeros planos y las zonas intensamente iluminadas, contribuyó a convertir el claroscuro original de Caravaggio en un violento contraste entre luces y sombras, reduciendo la composición a un solo plano. El tono amarillento del antiguo barniz también transformaba el cromatismo original de Caravaggio, alterando la idea del artista.

Los estudios técnicos de reflectografía infrarroja y radiografía permitieron conocer el estado de conservación de la pintura y revelaron cambios notables en la composición, como el rostro de Goliat aún vivo con una expresión dramática y el cuerpo en escorzo de Goliat.

Gracias al excelente estado de conservación, se pudieron apreciar las veladuras y los medios tonos, capas sutiles que ofrecen información valiosa sobre la técnica del artista. La limpieza también reveló la luz clara alrededor de la cabeza de David, el espacio que rodea la figura de David y la complejidad de la composición en un espacio rectangular.

El estudio radiográfico detectó dos daños accidentales, uno en la manga de la camisa de David y otro en su rodilla, ambos con restauraciones antiguas que invadían la pintura original. Estas restauraciones fueron eliminadas durante la actual restauración, integrando las faltas de color mediante el proceso de reintegración cromática.

Almudena Sánchez, responsable de la restauración, destacó: “Esta restauración nos muestra un nuevo Caravaggio, aportándonos una imagen de la pintura hasta ahora desconocida, la auténtica imagen de esta gran obra maestra que después de tanto tiempo en la sombra, recupera la luz con la que fue concebida”.