Por Candela Jiménez / Imágenes Miguel Trillo - La exposición de Pozuelo está compuesta por 40 retratos a color realizados en 16 ciudades de todo el mundo. “Muestro por primera vez mi fotografía de los años 10 que no se ha enseñado nunca, centrada en el mundo del Street Style, la estética de lo que se llamaba antes las tribus urbanas relacionadas con la música, pero en este caso relacionado con el mundo de la moda”, afirma Miguel en una entrevista a Pozuelo IN.

M. Trillo Los Angeles 2016 Comic Manga

Miguel Trillo nació en 1953, “¡el año en el que nació el Rock!”, exclama. La fotografía es su manera de enseñar la realidad artística, siempre se ha dedicado a la fotografía de “calle” en torno a eventos musicales y culturales, pero asegura que “en el siglo XXI ha cambiado el chip y se ha centrado en el mundo de la estética y la moda”, como refleja en su última creación “Pasarela Street”. Es conocido por sus numerosos trabajos fotográficos por ciudades de todo el mundo desde la época de la Movida Madrileña. Sus  obras se han expuesto en lugares tan señalados como: el Círculo de Bellas Artes de Madrid, el Museo Reina Sofía, el MACBA de Barcelona, el Metropolitan Museum of Art of Tokyo o el Carrousel du Louvre. 

M. Trillo, Ciudad del Cabo 2018, Pasarela Street

Desde el 4 al 23 de febrero Pozuelo acogerá en el Centro Cultural Padre Vallet, el último proyecto de Trillo. Un total de 40 foto-retratos componen este trabajo realizado en los últimos 10 años “Son retratos hechos en la calle en muchos lugares del el mundo: Asia, África, Europa y Asia, aunque desde la pandemia no he podido viajar y la única foto que hay del 2021 es de la Fashion Week de Madrid”, explica Miguel, que no fotografía monumentos ni lugares emblemáticos de las grandes ciudades, sino a su gente, sus festivales, sus calles… 

M. Trillo, Lisboa 2019 Pasarela Street

Es una exposición internacional hecha en 16 ciudades de todo el mundo como Seúl, Tokio, Nueva York, Londres, Madrid, Lisboa… “Los fotografiados son de todo el planeta, pero la exposición solo se verá en los municipios de Comunidad de Madrid porque es un proyecto de la Red Itiner organizado por la consejería de Cultura”, explica el artista. Durante todo un año las fotografías de Miguel Trillo recorrerán la Comunidad. La exposición está comisariada por Mónica Carabias, profesora de Historia del Arte de la Universidad Complutense y especializada en fotografía.  “El objetivo es descentralizar el arte en Madrid”, explica Trillo.

MTrillo, Madrid 1983, sala Rock-Ola

La vida interior a través de la ropa

“Mi exposición trata de moda y por eso se llama “Pasarela Street”: es como una pasarela, pero callejera, de gente anónima”, explica Trillo. La moda no es solo lo que se hace en el estudio, en el plató o en los espectáculos de las ‘Fashion Weeks’. “Ahí es todo como una representación teatral, ahora todo se graba”, asegura. Miguel se queda a las puertas de estos eventos hasta que ve a alguien que “tiene foto”, expresión que usa para referirse a las personas que salen en sus retratos. “Son personas que tienen foto porque tienen mucha vida exterior y manifiestan su vida interior a través de la ropa”, explica. 

M. Trillo, Nueva York 2019, Pasarela Street

Estas “fashion victims” no salen a la calle de cualquier manera, en ellos predomina la creatividad a la hora de vestirse y esto “llama la atención”. No son excéntricos sino creativos, “la ropa se convierte en una segunda piel que han elegido voluntariamente”, asegura el fotógrafo.  Las ‘fashion victims’ que retrata Miguel Trillo en esta exposición, y en las que ha hecho a lo largo de su carrera, son personas que customizan sus propios diseños por lo que “son unas víctimas en las que ellos mismos son los asesinos”, explica. 

M. Trillo, Shanghai 2017 Pasarela Street

Estos retratos llevan tiempo y dedicación por lo que Miguel suele hacerlos a la salida de las pasarelas porque “es un momento más tranquilo y no van con prisas”. Elige la ubicación, ve a una “fashion victim”, habla con ella y prepara el retrato. “Siempre aceptan y están encantadas porque son personas con exceso de escaparate, están orgullosas de cómo van vestidas”, comenta. “Hay que tener mucha paciencia porque la creación es un placer solitario. Lo bonito es eso, que estas personas estaban ahí, no se han vestido para mi foto, es un retrato de calle acotado”, remata Miguel explicando la magia de su fotografía. 

M. Trillo, Singapur 2016, Comic Manga

Aquéllos años de la Movida  

Desde la época de la Movida Madrileña Miguel Trillo ha centrado sus retratos en la gente joven: en conciertos, festivales, eventos culturales, pasarelas de moda… porque considera que “ser joven es un estado especial del ser humano”. “Siempre me he centrado en esta etapa de la vida porque los músicos triunfan con esa edad, en la moda también, con 20 años están en la cumbre de la vida”, explica Miguel, que considera que el gran consumidor de la cultura es el joven y es quien lleva la estética “al momento cumbre”. 

M. Trillo, Madrid 1984 El rastro, La Bobia

A principios de los 80, al finalizar la dictadura franquista y empezar la Transición española, en Madrid tuvo lugar un movimiento cultural y artístico conocido como “La Movida Madrileña”, y Miguel Trillo estuvo ahí para fotografiarlo. “Murió el comandante y empezó la diversión”, comenta entre risas mientras explica la libertad cultural y creativa que Madrid experimentó, “fue una explosión artística y yo la vi”, afirma. 

M. Trillo, Madrid 1984, salida Rock-Ola

En esa época Trillo se centró en la fotografía relacionada con el mundo de la música y el arte, pero manteniendo su esencia: fotografiar a gente del público anónima, aunque recuerda que, en ocasiones, hacía fotos a personas que le llamaban la atención y eran también músicos. “Recuerdo una vez que hice fotos a Alaska de público porque llamaba la atención y tenía foto”, relata con nostalgia de aquellos tiempos. 

M. Trillo, Madrid 1988, Azca hip hop

Pasó el tiempo y Miguel Trillo siguió disparando en la calle, ahora llega a Pozuelo de Alarcón con otra de sus exposiciones asombrosas donde late con fuerza la sangre de la calle.

M. Trillo, Madrid 1988, disco Four Roses